Aunque la temporada alta de bodas está concentrada en los meses de temperaturas más cálidas, son cada vez más las parejas que por unos motivos u otros se dan el ‘sí, quiero’ en invierno. Y es que los enlaces de la estación más fría están llenos de encanto. Adaptarse a estas fechas no es tan complicado como parece: basta con completar el vestido de novia con un abrigo o capa que aporte calidez al look y recurrir a un calzado más propio, como las botas o los botines. Un complemento que ya lleva tiempo presente en el mundo nupcial y que ahora que las bodas informales están en alza, es un imprescindible.
SIN RIESGO, PERO DE TENDENCIA
Unos botines blancos pueden ser el aliado perfecto de las novias de invierno. Pero hay que elegirlo bien para que el look no resulte aburrido. En lugar de optar por diseños básicos, lo mejor es hacerse con modelos de tendencia, de esos que incorporan detalles que hacen el accesorio diferente, pero no asumen grandes riesgos. La mejor mezcla la encontramos en la propuesta de la imagen, de la colección In Time de L’Arca.
- Botines con cordones, con efecto cocodrilo y confeccionados en tejido vegano, de Z_Code_Z.
- Botín blanco con efecto arrugado y puntera redondeada, elaborado en cuero, de Guidi. Disponible en Farfetch.
CON BOTAS ALTAS
No solo los botines se convierten en la mejor alternativa para esas novias que, en los meses de invierno, no quieren llevar zapatos. También las botas. Aunque la elección del color es cuestión de gustos, al tratarse de una pieza de un tamaño mayor al de los botines lo mejor es apostar por tonos claros, neutros, empolvados o, directamente, ir al blanco. Con este tono no fallarás nunca, algo que demuestran desde la firma Cossy con la mezcla de la foto. Elegante, sorprendente… ¡y muy invernal!
- Botas con una altura que asciende hasta la rodilla, tacón tipo bloque y efecto piel de serpiente, de Public Desire.
- Botas tipo cowboy de piel, con tacón geométrico, punta cuadrada y suela en contraste, de Zara.
SÍ AL DORADO
No es casualidad que, a la hora de elegir sus complementos, muchas novias apuesten por el dorado. No solo es un color que funciona bien con el blanco -el tono predominante en el look nupcial-, sino que aporta luz y alegría al estilismo sin necesidad de arriesgar demasiado ni caer en excesos. El ejemplo más claro lo encontramos en esta fórmula de Teresa Helbig, en la que la diseñadora propone unir uno de sus vestidos de nueva colección con unos botines de Serena Whitehaven. Eso sí, para dar un toque totalmente especial, apuesta por un modelo con glitter.
- Botines metalizados confeccionados en cuero, terminados en punta y con tacón tipo stiletto, son el modelo Kiki 100 metalizados de Saint Laurent.
- Botines combinados con glitter en la puntera y tacón cómodo de 4 centímetros de altura. Son el modelo Montana de Serena Whitehaven.
EL PODER DE LOS CONTRASTES
Hay novias que, al elegir su calzado, quieren cierta continuidad en el look y que no llamen la atención por encima de otros complementos. Pero también están las que buscan todo lo contrario. En eso casos lo mejor es jugar con los opuestos y elegir colores como el negro: fáciles de combinar, pero chocantes dentro de un estilismo de novia. Una mezcla que funciona, tal como comprobamos en esta imagen de Tot Hom, y que es apta para las más atrevidas.
- Botines tipo militar, con cordones en la parte delantera y cremallera lateral para mayor comodidad, confeccionados en cuero. Se trata del modelo Liv de Serena Whitehaven.
- Botines confeccionados en piel ovina, con cremallera lateral y tacón en relieve pintado con una altura de 7 centímetros, de Uterqüe.
