Desde el momento del compromiso, cuando tu novio/a te ha pedido que seas su compañera de vida, su otra mitad, y su amor por siempre, los anillos de compromiso y matrimonio se convierten en grandes símbolos de esta unión, y de la promesa de estar el uno para el otro, por el resto de sus días. Lo que muchos novios no saben es que, a lo largo de los años, la tradición ha sido muy clara y específica en relación a la mano y el dedo indicado para llevar la argolla de compromiso y la de matrimonio.
Por esa razón, si aún desconoces si será en la mano derecha o izquierda, en el dedo anular o corazón, o dónde colocamos el anillo de compromiso una vez que comenzamos a llevar el de matrimonio, ¡no te preocupes! Aclararemos todas tus inquietudes y además te explicaremos las tradiciones e historias de estos símbolos tan maravillosos.
1. ¿POR QUÉ SE USAN?
Una de las primeras interrogantes que muchos novios se realizan es: ¿desde cuándo se usan las argollas de matrimonio y cuál fue su origen? Lo cierto es que estas prendas han sido utilizadas como símbolos del matrimonio desde tiempos del antiguo Egipto. Aunque para ese entonces, el anillo era utilizado solo por la mujer, hasta mitad del siglo XX, donde los hombres fueron adoptando esta costumbre.
Algunos historiadores aseguran que fue en mediados del siglo XX cuando las argollas se convirtieron en tendencia. Sin embargo, en sus inicios, las argollas eran un regalo que le hacía el hombre a la mujer, para simbolizar la confianza que tenía en ella. Asimismo, eran señal de que la mujer estaba casada y ningún hombre debía cortejarla. Según se ha conocido, su forma redonda se dio debido a que los egipcios simbolizaban al amor como un círculo el cual no tenía principio ni fin, y como resultado, representaba lo eterno y el amor infinito.
Desde entonces, a pesar de algunas modificaciones y diferentes definiciones, esta tradición llega hasta nuestros días y se convierte en parte fundamental de toda unión matrimonial, representando una unión perfecta de pareja, y simbolizando el amor, el compromiso y la fidelidad eterna. De esa manera, luego de que los novios se prometen amor, las argollas sellan los votos y sirven para recordar dicha promesa.
2. ¿CUÁNDO ACEPTÓ LA IGLESIA EL USO DE LAS ALIANZAS?
Gracias al Papa Nicolás I, las alianzas comenzaron a formar parte de las ceremonias religiosas en el siglo IX, luego de una larga lucha y superación de muchos impedimentos. En ese momento, se decretó la ley con la cual, darle a la novia un anillo durante la ceremonia era sinónimo de declararle de manera sincera la intención del hombre de casarse con ella.
Puede que te estés preguntando quién será el responsable ideal para crear tus hermosas alianzas. Si eso es correcto, te recomendamos darle un vistazo al perfil de Joyería MAO. Sus increíbles joyas se vienen creando desde hace más de 20 años, enfocándose especialmente en anillos de compromiso y de matrimonio. Cuentan con un equipo de expertos, que además de conocer la excelencia y el compromiso, crean vínculos cercanos con sus clientes para brindarles confianza. Además, ofrecen diferentes tipos de argollas de matrimonio y compromiso, sin dejar de brindar un servicio de manufactura a pedido, con el cual los novios pueden participar en el diseño de los anillos y así obtener una hermosa prenda personalizada.
3. ¿MANO DERECHA O IZQUIERDA?
Primero debes considerar que la decisión de llevar el anillo de matrimonio en una mano o en otra, es completamente de los novios. Sabemos que muchas parejas no siguen “tradiciones” y les gusta crear su propio protocolo. O simplemente se sienten cómodos con llevar anillos en una mano más que en la otra. No existe problema con ello.
Sin embargo, existen novios clásicos que aman seguir las tradiciones. Para ellos, las tradiciones varían según el país donde se encuentren. Verónica Hecht Joyas explica que tradicionalmente el anillo de matrimonio o las argollas de matrimonio se colocan en la mano izquierda y, efectivamente, Chile adopta esta idea. Personas en otros países las llevan en la mano derecha, pero esto va a depender de las costumbres de cada uno de ellos. Otros novios prefieren llevar las argollas lo más cerca posible del corazón. Para ello, las llevan colgadas al cuello. Otra manera es llevarlas en manos diferentes, y una vez las junten, los anillos se entrelacen. Queda a decisiones de los novios dónde llevar los anillos, si rompen las reglas o se unen a las tradiciones de llevarlos en la mano izquierda.
4. ¿DEDO ANULAR O CORAZÓN?
¡Siempre dedo anular! Si existe algo en lo que todos coinciden, no importa si deciden llevar el anillo en la mano izquierda o en la derecha, es que la argolla siempre va en el dedo anular. Una de las principales razones y quizá la más poderosa es que los romanos señalaban que este dedo se conectaba con el corazón mediante una vena llamada “vena del amor” o “vena amoris”. Por esa razón, no había un dedo más especial para llevar la alianza que simboliza la promesa del amor.
En Chile se obedece esta tradición y los novios acostumbran a llevar su anillo de matrimonio en el dedo anular de la mano izquierda. De hecho, si lo piensas bien, es una ubicación ideal y va más directo y cerca hacia el corazón.
5. ¿QUÉ HAY DEL ANILLO DE COMPROMISO?
Ya sabes dónde usar tu alianza de bodas, pero te puedes estar preguntando: ¿dónde queda mi anillo de compromiso una vez me haya casado? La mayoría de las novias de Chile lo llevan en la mano derecha (antes de su matrimonio), pero una vez ha dado el gran sí, traslada ese anillo junto al de bodas en la mano izquierda, quedando en el mismo dedo.
6. ¿QUÉ PASA SI ME CASO POR EL CIVIL Y DESPUÉS POR LA IGLESIA?
No existe protocolo alguno en relación a los anillos para una boda doble. Depende totalmente de los novios lo que se decida. Existen algunos casos donde los novios deciden esperar a su ceremonia religiosa para comenzar a usar los anillos. Para otros, la espera puede resultar tormentosa por lo que deciden que, al casarse por el civil, comenzarán a usar el anillo en la mano derecha (provisionalmente), y luego al casarse por lo religioso, lo cambian hacia la mano izquierda. Así que te recomendamos conversarlo con tu novio/a y tomar las decisiones que deseen y con las que estén de acuerdo.
Cuando hablamos de protocolo, de tradición y de costumbres, siempre concluimos de la misma manera: todas y cada una de las decisiones que se tomen en un matrimonio, y todos los detalles que se incluyan en él, deben estar tomados por los novios. Recuerda que es un gran día para ambos y deben seguir sus instintos, ideas y sueños para que todo resulte tan mágico como quieren.
